Es músico y poeta. Como músico hace mejor lo segundo, y como poeta lo primero.
Sobre la luz
de Calipedia
infinito destruyes
confines
del universo
prueba irrefutable
de tu
pasado
en sombras
XXXIV
Lámpara sangrienta
ahuecando
mis ojos
con su luz
tu luz, tulús lutrec
y prostitutas
confines
sin fines
a fines
de lo que nadie
quiere explicar
XIV
No hay fantasmas
en la
ópera
solo quedan
infinitos sobres
sin abrir
puertas infinitas
de la
madera
descubiertas.
XVIII
contra bajo
recorre calles
tu alegría
delirante
maletín
de penas y
muchos olvidos
XXII
infinitos
afines
tan remotos
como la
onomatopeya
iujuuuuuuuuu
de boca surgida
delirante
caricias al margen
de una piel
sin dragones.
jueves, septiembre 14, 2006
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario